Tejidos de barrio, una propuesta ejemplar en el colegio ITI del Génesis de Armenia, impulsada por estudiantes de la Universidad del Quindío.
A través de la música los jóvenes de los grados 11A y 11B de la Institución Educativa ITI en el barrio Génesis de Armenia, adelantan una nueva propuesta de reconocimiento de su entorno, del sitio donde han crecido y viven.
La idea surgió desde los mismos alumnos y es impulsada por los jóvenes hermanos Pablo Andrés Castaño Villegas y Juan Pablo Castaño Villegas, dos inquietos estudiantes de noveno semestre de Licenciatura en Español y Literatura de la Universidad del Quindío,
La propuesta, denominada “Tejidos de barrio” ha sido pensada desde las problemáticas de los estudiantes del ITI, a través de procesos didácticas que combinan la literatura y lo musical con el género rap.
“Alcolirycoz, Canserbero, Crack Family, Ali A.K.I. MIND y Danny Suarez son las propuestas musicales, mientras que desde lo literario con Julio Cotázar, Andrés Caicedo, Mario Mendoza, Felipe Orozco, y por último, desde el componente didáctico con Marta Noussbaum y Fernando Vasquez”, explica Pablo Andrés, quien dice que los jóvenes están muy motivados en este proceso.
“Estos muchachos nos han enseñado mucho más de lo que teníamos pensado, nos recibieron a pesar de las posibles diferencias y trabajaron interesados en aprender. Agradecemos a los profesores Graciela Uribe Álvarez y Alejandro Rubio de la Universidad del Quindío por el acompañamiento en la construcción de la secuencia didáctica, y a la profesora del colegio ITI, Dora Tobón Ortiz, por la disposición al recibirnos en el plantel educativo y estar atenta con el grupo”, expresaron los hermanos Castaño Villegas.
Agregaron que se sienten muy agradecidos con los estudiantes que les brindaron una luz de esperanza al enviar un mensaje de paz mediante el teatro, el cuento y las manualidades.
“El problema no es únicamente de los estudiantes. Hay que analizar los modelos y los conceptos que se les enseñan, pues recordando aun gran rapero venezolano: “No es una solución dar educación a los pobres si les das una pobre educación”.
Tejidos de barrio
(Por Los Gemelos Castaño Villegas)
Cuando José Hernández inmortalizó la imagen de Fierro como símbolo de la pampa y la vivencia de los gauchos, nos mostró una vez más la belleza del lenguaje, la virtud del buen observador y la importancia de la otredad. Y es sencillo imaginar a Hernández en medio de la llanura, arrimando leña al mate, cavilando sobre las problemáticas de sus paisanos, escribiendo con un lápiz desgastado de nostalgia.
Pues así como él, aquel que se inclina por la docencia también necesita de reflexión en la llanura y de mate amargo. Necesita ponerse en los zapatos del otro para que su trabajo tenga sentido alguno. Ahora, acercando un poco la vista a nuestro contexto, en donde la llanura es de cemento y son otros los peligros, necesitamos también, al igual que Fierro, una buena daga para librarnos de todo mal.
“Tejidos de barrio” es esa daga, una propuesta pensada desde el estudiante, desde sus problemáticas. Parece tener un tono generalizador, sin embargo, para nadie es secreto la complejidad de los tiempos que vivimos, solo basta con un paseíto nocturno el fin de semana, alejados de los conjuntos cerrados y de los barrios tranquilos. Hay que ver lo que pasa esquina adentro. Hay que ver lo que hace la noche en la población a la que enseñan.
Pero ¿por qué resulta importante esto?
Somos influenciados en gran medida por los espacios que habitamos, y si no entendemos cómo funcionan, nos dejaremos maravillar por cualquier posibilidad de cambio sin importar las consecuencias.
Estamos hablando de fronteras invisibles, prostitución, adicciones, robo, extorsión, entre otros ornamentos de nuestra pavimentada sociedad. En otras palabras, se trata de poner sobre la mesa varias perspectivas de mundo, varios posibles caminos y no siempre ese de sangre que están acostumbrados a recorrer.