Especialistas explicaron porqué llueve en pleno Fenómeno del Niño en Colombia. Aun no es el fin de la temporada de verano como muchos creen.
En los últimos día llovió en diferentes partes de Colombia y como si se tratase de un milagro usuarios en redes sociales mostraron con entusiasmo a través de videos su felicidad por volver a tener días fríos después de una temporada larga de calor.
Precisamente el país atraviesa desde finales de 2023 por el Fenómeno del Niño, que ha llegado con un intenso verano que incluso ha causado múltiples emergencias como incendios forestales y bajo caudal en ríos y quebradas que amenaza con racionamientos de agua en varios municipios.
No obstante, aunque se haya presentado una tregua de días soleados, esto no significa necesariamente el fin de la temporada de verano.
Ghisliane Echeverry, directora del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales -Ideam- explicó las razones por las cuales se presentan estas lluvias que no marcan el fin del Fenómeno del Niño.
“Las lluvias se pueden presentar durante El Niño y en temporadas secas, como lo vimos el fin de semana pasado y como lo hemos estado viendo estos días en gran parte del país. Esto está relacionado por frentes fríos, por brisas que vienen, por la onda de Madden y Julian, y por diferentes fenómenos meteorológicos que convergen también en el territorio nacional”, explicó la funcionaria a El Tiempo.
Echeverry enfatizó en que las altas temperaturas puede darse a la par con lluvias y otras actividades atmosféricas que también corresponden al impacto del cambio climático y el calentamiento global que sufre el planeta.
En ese sentido señaló que los impactos no siempre se siente de inmediato sino que llevan un tiempo, por ejemplo el fenómeno se anunció desde noviembre, pero situaciones como sequías solo se vieron hasta enero de este año.
Por último la directora del Ideam sostuvo que la temporada seca se puede intensificar en febrero «porque va a llevar el impacto acumulado de todo el mes de enero en déficit de precipitación”. Esto traería afectaciones en los caudales hídricos, la erosión de los suelos, los cultivos, afecta el abastecimiento para consumo humano y, por supuesto, muchas líneas y sectores”, concluyó.
