Pijao está seguro gracias a muros de contención en el río Lejos contruidos tras inversión de la gobernación del Quindío
Quien visita a Pijao descubre que el agua brota por donde se le mire. Las múltiples fuentes hídricas con las que cuenta el municipio dan cuenta de la riqueza medioambiental de esta localidad de cordillera, que ha crecido resguardada por el río Lejos.
Pero paradójicamente y debido a prácticas no adecuadas en lo alto de la montaña, desde hace un tiempo se convirtió también en una amenaza.
Y es que la erosión ha generado decenas de kilómetros de cárcavas, extensiones de tierra que pueden originar deslizamientos y taponar al río pueblo arriba. El peor escenario recuerda la tragedia vivida en Mocoa, en la que el agua represada se liberó de manera repentina, bajando con miles de toneladas de roca y tierra, inundando el pueblo.
Por eso la administración departamental reconoció la necesidad de edificar muros de contención en varios puntos críticos de su cauce para aislar el casco urbano de Pijao; una iniciativa que se había planteado en administraciones pasadas pero que se ejecutó en este gobierno de Roberto Jairo Jaramillo.
576 metros de muro ubicados en diferentes tramos, protegen hoy en día a los 3.700 habitantes de eventuales inundaciones o avenidas torrenciales, que en 2018 alcanzaron a aislar barrios como Primavera, Paraíso, Jardín y Cacique.
Para esto, se destinaron 8.103 millones de pesos que fueron ejecutados por Proyecta mientras la interventoría tuvo un valor de $570 millones. Entre tanto, se avanza en la siembra de árboles en la parte alta de la cuenca para que, en un mediano plazo, se dé un proceso de bioingeniería que estabilice los terrenos donde hoy se encuentran las cárcavas.
Marta Lucía García Ávila, presidenta de la Junta de Acción Comunal de Callelarga La Playita, recuerda el temor que reinaba en la comunidad cuando caían fuertes lluvias: “El río Lejos es un león dormido, cuando uno menos piensa está crecidísimo. En la parte de arriba tenemos dos cárcavas en la finca Las Camelias y en la cañada La Española, y en 2011, por ejemplo, el río se llevó el puente que había allí. Ha habido damnificados, y la población le pedía estos muros a todos los gobernadores, hasta que hoy en día, llegó la hora de tenerlos”.
Al respecto, el gobernador Roberto Jairo Jaramillo Cárdenas señaló que “debido a su condición geográfica, la ubicación del Pijao es bastante delicada, e incluso se ha llegado a hablar de su evacuación».
«Con estos muros mitigamos el riesgo en este lugar de que se presente una avalancha. Esta es una construcción que estaba pidiendo la comunidad hace más de 10 años y hoy les podemos mostrar que el muro es un hecho”, comentó el gobernador.
Y agregó que «con esta obra, los pobladores de Pijao se levantan cada mañana con una mejor expectativa y sin temer por su seguridad o la de los suyos, porque con la gestión y ejecución de esta estrategia, la Gobernación permite que tanto el río como la vida, sigan su cauce».