En medio del ritual de bautizo de una Iglesia Ortodoxa en Rumania, un bebé de 6 semanas sufrió un paro cardiorrespiratorio al ser sumergido 3 veces en agua bendita.
La iglesia anunció investigación interna por el hecho ocurrido este lunes 1 de febrero, donde un momento de celebración terminó en tragedia. Cuando el bebé fue trasladado al hospital, ya había fallecido.
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Según el reporte de la autopsia, el bebé tenía agua en sus pulmones, la cual pudo haber tragado o aspirado mientras era sumergido sin compasión en el agua.
Y es que la ceremonia de bautizo tradicional en la iglesia cristiana ortodoxa ha sido criticada durante años, y aunque según informó la misma institución, se han modificado los mecanismos para realzarla, hay sacerdotes apegados a las tradiciones que vienen desde hace siglos.
A esta iglesia pertenece el 80% de la población rumana, por lo que este hecho ha conmocionado a la comunidad. De ahí que se firmara un derecho de petición para que se modifique la modalidad de bautizo en los niños.
56.000 personas ya han firmado la petición en la que se lee, “La muerte de un recién nacido por esta práctica es una gran tragedia. Este riesgo debe descartarse para que triunfe el gozo del bautismo”.
Las autoridades del país abrieron investigación por homicidio involuntario.
