Clan del Golfo

La Defensoría del Pueblo advirtió sobre la presencia del Clan del Golfo en el Quindío, sin embargo autoridades locales negaron el informe.

El temido grupo armado del Clan del Golfo está también en el Quindío según el mapa de riesgo emitido por la Defensoría del Pueblo.

De acuerdo con el ministerio Público, dicha estructura criminal dedicada a varios negocios ilícitos como el narcotráfico y la minería ilegal en los últimos años ha extendido sus tentáculos a casi todas las regiones del país, pues su accionar se expandió desde el Urabá antioqueño hasta la costa caribe, el pacífico, el Eje Cafetero y Bogotá.

“Como Estado nos dejamos coger ventaja de las Autodefensas Gaitanistas de Colombia -AGC- Clan del Golfo. Ellos han venido demostrado su poder y su capacidad de paralizar varios departamentos”, señaló el Defensor del Pueblo Carlos Camargo Asís.

El funcionario manifestó que esta Bacrim se asemeja a una holding del crimen, que maneja varias actividades criminales y tiene subcontratadas a estructuras del crimen organizado para el microtráfico y la extorsión.

Esto quiere decir que la presencia de este grupo en un territorio no significa necesariamente que se trate de delincuentes que patrullan con brazaletes y uniformes alusivos al grupo armado, sino que simplemente son estructuras que operan bajo otros nombres, pero pertenecen a la misma red delincuencial.

Vea a continuación el mapa de advertencia de la Defensoría:

 

Autoridades niegan presencia del Clan del Golfo en el Quindío

Tras el informe emitido por la Defensoría del Pueblo, se escucharon varias voces de autoridades en el Quindío que negaron la información del ministerio Público, entre ellas policía, ejército y gobernación.

La comandante de la Policía Quindío, coronel Alba Patricia Lancheros Silva, no reconoció que en el departamento exista presencia de este grupo armado.

Desde la Octava Brigada del Ejército también desvirtuaron toda información que señale la presencia de este grupo en el territorio, ya que apuntaron a que han actuado para contrarrestar cualquier acción o intento de intromisión de dicho clan.

En ese sentido la secretaría de Interior del departamento, Juana Camila Gómez, le indicó al diario Nueva Crónica Quindío que la información que manejan es la que suministran la inteligencia de policía y ejército, es decir, no pueden reconocer algo que no está advertido por las autoridades durante consejos de seguridad.

 

Golpes contra clan del Golfo en el Quindío confirmarían presencia de este grupo armado

A pesar de que las autoridades locales se empeñan en desconocer que el Clan del Golfo tiene injerencia en el Quindío, lo cierto es que los propios golpes que se han propinado a esta organización en el departamento, demuestran que sus tentáculos sí han llegado al territorio.

En diciembre de 2020 fue capturado en Filandia John Freddy Zapata, alias Messi, un narco de la estructura de alias ‘Otoniel’ que lavaba dineros a través de varias empresas y venta de jugadores de fútbol a México, Argentina, Brasil y los Balcanes.

En febrero de 2022 fue capturado en Quimbaya Mario Garzón Escobar, alias Mario Bross, un hombre de la entera confianza de Otoniel y que fue su emisario ante alias Iván Márquez de las disidencias de la Nueva Marquetalia de las Farc, para pactar envíos de droga por territorio venezolano.

Garzón, al parecer también se reunía con emisarios de los carteles mexicanos, “era uno de los pocos hombres que tenía acceso directo a Otoniel. Durante días cruzaba ríos y caminaba en espesas selvas para reunirse con el líder criminal. A los pocos días volvía, viajaba a Bogotá y bajo su fachada de próspero comerciante frecuentaba lujosos restaurantes de la capital”, señalaron fuentes de inteligencia de la Policía Nacional.

 

Autoridades también desconocieron advertencia sobre carteles mexicanos

Sumado a esto se han registrado otra serie de denuncias que al parecer también desconocían las autoridades judiciales quindianas, pues un informe de inteligencia militar revelado por El Espectador apuntó a que el Quindío se convirtió en ‘escampadero’ de narcos de carteles de droga de México, otro informe que negaron.

Aun más grave fue la revelación de otro documento de inteligencia que denunció la presencia de un narcotraficante del Cartel de Sinaloa que vivía muy tranquilo de vecino de un batallón en Armenia sin que las autoridades actuaran en su contra.

Ante estos hechos queda un manto de duda respecto a la postura de las autoridades en el departamento, pues es evidente que hombres claves de dicha organización y otras estructuras criminales han tenido influencia en suelo quindiano.

Entonces queda la inquietud si es una incapacidad de inteligencia militar y policial para descubrir estas andanzas o si es pura indiferencia para no generar pánico entre los quindianos.