La unidad investigativa de Noticias Caracol reveló en exclusiva mundial los testimonios de los mercenarios colombianos que participaron en el magnicidio del presidente de Haití, Jovenel Moïse, acontecido en la madrugada del pasado 7 de julio.
De acuerdo con las declaraciones obtenidas por el medio, el asalto a la casa presidencial duró media hora y entre los objetivos de los exmilitares colombianos estaban capturar al mandatario con una orden de arresto falsa, robar el dinero que había en el sitio y posesionar como nueva jefe de Estado a Windelle Coq, conocida como ‘diamante’ una jueza que había sido destituida por Moïse en meses pasados.
Lea también: Exigen repatriación de ex militar quindiano abatido tras asesinato del presidente de Haití
Sin embargo, el plan cambió sobre la marcha y la orden que emitió el capitán Germán Rivera, más conocido como ‘Mike’ es que al entrar a la casa «había que matar a todos, hasta la mascota» relató el mercenario Jheyner Carmona Flórez.
Justamente esta orden habría venido de Joseph Badio, ex funcionario del ministerio de Justicia de Haití. Precisamente él habría acompañado a los mercenarios durante el operativo en compañía de policías haitianos, pero huyeron del lugar una vez empezó el fuego cruzado entre las autoridades haitianas y los colombianos.
Otro de los testimonios de los mercenarios que se mantuvo en el anonimato por seguridad dijo que Claude Joseph primer ministro de Haití sería responsable del magnicidio.
«Se tumba a Jovenel y queda el primer ministro. Ellos ni siquiera tienen que hacer un plan de escape porque el primer ministro los iba a proteger“ cuenta el mercenario y agrega, “En vez de protegerlos los traicionó, les puso una trampa y a la media hora ya había dicho que eran colombianos, sin ninguna investigación y sin nada”, sostuvo. Otros nombres que son involucrados son los James Solage y el médico y pastor religioso Emmanuel Sanon.
El papel del quindiano Duberney Capador en el magnicidio del presidente de Haití
Una vez los mercenarios neutralizaron los 3 anillos de seguridad que tenía el mandatario, llegaron a la portada de la casa de Moïse, allí el exsargento quindiano Duberney Capador, que había sido el principal reclutador de mercenarios, tenía la tarea de supervisar la operación dentro de la residencia en permanente comunicación con Rivera que esperaría en la entrada.
El grupo delta, que tenía los hombres más experimentados, quienes pertenecieron al bloque de búsqueda en Colombia entre los que estaba Capador, se hicieron con el control de la casa, donde incluso había policías haitianos que aunque estaban armados no opusieron resistencia al plan de los mercenarios.
Le puede interesar: Exmilitar quindiano sabía plan para matar al presidente de Haití. Habría sido reclutador de mercenarios
Ya en el segundo piso, 4 mercenarios ingresaron a la habitación del presidente Moïse que se encontraba junto a su esposa Martine, a este lugar accedieron Capador, Yepes, Romero y Pineda, éste último según los testimonios sería el hombre que le disparó al presidente con su fusil M4.
12 impactos de bala le segaron la vida a Jovenel mientras su cónyuge quedó con heridas en uno de sus brazos y abdomen pero sobrevivió milagrosamente.
Mercenarios también robaron dinero y documentos
Con Moïse muerto, los mercenarios colombianos se concentraron en el dinero. Antes del operativo les habían informado que Moïse tenía entre 18 y 45 millones de dólares en su casa. En la habitación encontraron dos maletas y tres cajas al parecer cargadas de billetes.
según contó el capitán Germán Rivera el dinero era para CTU, la empresa que reclutó a los mercenarios, y otra parte sería el pago de los colombianos. También se llevaron documentos del presidente y el sistema de grabación de las cámaras de vigilancia.
Vea también: Exmilitares colombianos sí habrían asesinado a presidente de Haití. Primer Ministro sería responsable intelectual
“Las maletas se embarcaron en el primer vehículo donde iba con James, ahí se embarcaron las maletas, se embarcó el sistema de cámaras, se embarcaron unos sobres de manila que tenían unos documentos”, señaló el mercenario.
No hubo fuga porque los mercenarios fueron traicionados
De acuerdo con el testimonio de Yarce Sierra, Capador los intentó guiar al Palacio presidencial, porque según él la policía que estaba allá los iba a proteger, sin embargo camino al Palacio las camionetas en las que se movilizaban fueron obstaculizadas por las autoridades haitianas.
“Me doy cuenta de que el primer vehículo se encuentra con unos carros que están atravesados en la carretera, que no nos van a dejar pasar. Al estar bloqueados ahí nos toca parar, nos bajamos de los vehículos y nos quedamos sobre la vía”, precisó Yarce.
Lea también: «Exmilitar quindiano fue a Haití a proteger al presidente y no a asesinarlo», dice su hermana
En horas de la mañana los colombianos se refugiaron en una casa, esperando un rescate que les prometió Arcángel Pretel, el colombiano que dirigía la empresa reclutadora CTU, pero tal ayuda nunca existió, aun cuando Capador dijo estar coordinando la salida de ese lugar, nadie llegó.
En la tarde empezó la arremetida de la policía de Haití “Eso fue una locura total, eso escuchar y recibir tanto impacto, tanto plomo. Eso fue bastante aterrador para todos ahí, uno siente mucho miedo. Le daban ahí a la puerta, a las paredes, luego se iban y le daban a la casa de abajo”, contó Carmona.
La muerte de 3 mercenarios colombianos
En medio de la arremetida cayó el primer colombiano: el sargento Javier Romero. “Nos atacaron muy fuerte. Nosotros pues teníamos muy pocas armas, muy pocas municiones y lanzaron una granada de mano y Javier estaba en una esquina agachado y le cayó la granada de mano”, dijo el capitán Rivera.
Luego murió exsargento quindiano, Duberney Capador, el hombre que reclutó a la mayoría de mercenarios y el militar más experimentado del grupo.
Le puede interesar: Exmilitar quindiano habría participado en asesinato del presidente de Haití. Fue uno de los abatidos
Rivera recordó ese momento: “Después de la granada nos fuimos para la otra esquina, a refugiarnos en la otra esquina de la parte de atrás de la casa. En esa nos tiran otra granada en la misma dirección y una esquirla hiere a Capador. De atrás hacia adelante, una esquirla con orificio de entrada y orificio de salida. Ahí lo dejamos, tratamos con el paramédico de hacer lo que pudiéramos pero todos los botiquines, todo eso estaba en las camionetas».
Después murió el exsoldado Miguel Garzón, que al parecer se disparó por accidente, según el relato de Carmona. «Garzón simplemente lo que decía en esos momentos, nos decía a nosotros era: mátenme, mátenme, mátenme, no me dejan así, esto duele mucho, esto duele mucho, mátenme (…) pero luego nos dimos cuenta que a él no lo mataron, a él se le disparó el fusil, él tenía la costumbre de andar con el fusil desasegurado».
Huida a la embajada de Taiwán y captura
En la noche del 7 de julio los colombianos se movieron entre muros y tejados para llegar hasta la embajada de Taiwán que quedaba a pocos metros de la casa donde estaban refugiados.
Pasaron la noche en la embajada mientras las cabezas de la conspiración seguían haciendo promesas falsas . Carmona contó: “Nos decía luego que ya la embajada de Estados Unidos se estaba moviendo, que iban a traer yo no sé cuántos soldados americanos, que para que nos sacaran”.
No obstante, las autoridades haitianas entraron a la embajada de Taiwán y encontraron a los colombianos escondidos en una habitación la mañana del 8 de julio.
“Estábamos ahí encerrados y ya empezamos a escuchar desde por la mañana que habían ingresado, estaban haciendo registro en la habitación donde estamos, y a la final se metieron, ingresaron, nos capturan, ahí pues nos colocan las esposas”, narró Carmona.
A continuación el informe de Noticias Caracol sobre lo ocurrido:
Toda la razón, necesitamos policías y militares menos sangrientos, así las FARC se toman el país y somos la siguiente Venezuela
Qué vergüenza! Colombia prepara ese tipo de militares. Y la empresa reclutadora otra vergüenza mundial. Realmente se necesita una reforma profunda a la policía y ejército.