El máximo tribunal sentenció a Mario Castaño a 15 años de cárcel por el escándalo de corrupción de ‘Las Marionetas’.
Este viernes se dio a conocer la condena a prisión por 15 años y 11 meses al ex senador caldense Mario Castaño por diferentes delitos relacionados a la corrupción en contratación.
La Sala Especial de Primera Instancia de la Corte Suprema de Justicia tomó la decisión tras surtir el proceso penal en donde se expusieron 19 delitos.
A Mario Alberto Castaño Pérez se le acusa de desviar los recursos públicos que tenían como destino la ejecución de obras de infraestructura en varias zonas del país.
Por lo anterior se le señala de concierto para delinquir agravado en calidad de autor, estafa agravada como determinador, concusión en calidad de autor, peculado por apropiación, entre otros.
Con el objetivo de acortar el proceso y obtener beneficios durante la investigación, Mario Castaño aceptó la responsabilidad en dichos cargos.
Confesó ser el líder de la red de corrupción en el escándalo que estalló durante junio de 2022 denominado ‘Las Marionetas’ y con el cual se desviaron cerca de 112 mil millones de pesos del Estado Colombiano al bolsillo de una red delincuencial encabezada por el exsenador.
En la sentencia de primera instancia la Corte Suprema también le pide pagar una multa de 1.060 millones de pesos, negándole la suspensión condicional de la ejecución de pena y la prisión domiciliaria.
En su contra, quien en su momento fue formula legislativa de la hoy representante a la cámara por el Quindío, Sandra Bibiana Aristizábal, también reposa una demanda en donde se pide ‘muerte política’ al político colombiano.
Los tentáculos del corrupto Mario Castaño en el Quindío
Mario Castaño aceptó que lideró una estructura criminal que funcionó especialmente en los departamentos de Quindío, Caldas, Risaralda, Valle del Cauca, Chocó, Cauca y Tolima.
Precisamente en el Quindío tuvo gran poder en la gobernación de Roberto Jairo Jaramillo, quien además de permitirle imponerle la banda como mandatario, le entregó puestos en la misma gobernación y en entidades tan importantes como Proyecta Quindío, donde puso como gerente a Pablo César Herrera, quien según la Fiscalía es una de las fichas claves del entramado de corrupción.
También en Proyecta estuvieron contratados los hermanos Alejandro y José Eduardo Noreña Castro, contratistas ambos vinculados al proceso de ‘Las Marionetas’ y cercanos a Mario Castaño.
Igualmente la novia del corrupto senador, la psicóloga Daniela Ospina Loaiza, quien acerptó cargos por corrupción en octubre pasado, también contó con dos contratos en la gobernación del Quindío, que sumaban más de 18 millones de pesos.
Ex senador traicionó la confianza de electores
Los magistrados de la Corte Suprema de Justicia consideraron que las actuaciones del ex senador caldense violentaron la confianza de sus votantes.
«Pero aquí esa confianza ciudadana, de votantes o no en que los miembros del órgano legislativo cumplan su función de actuar consultando siempre el bien común, fue traicionada por Mario Alberto Castaño Pérez”, reza la sentencia.
Utilizando su poder y contactos ejerció presión para beneficiarse con contratos en los Ministerios del Deporte, Cultura y del Interior.
De cada contrato, el cerebro criminal obtenía un 10% sobre el valor total del mismo. El saqueo del erario público dejó rastro en los departamentos de Caldas, Cauca, Chocó, Risaralda, Tolima y hasta Valle del Cauca.