En las últimas horas el ex jefe paramilitar, Salvatore Mancuso rindió testimonio ante la Sala de Justicia y Paz del Tribunal Superior de Medellín en medio del proceso que se adelanta en contra del también exparamilitar, Diego Fernando Murillo, alias Don Berna.
En las diligencias, Mancuso hizo graves acusaciones sobre el papel cómplice del Estado en magnicidios y en el desarrollo de las autodefensas en el país, las cuales según él no hubieran podido crearse sin el apoyo de varias instituciones estatales y sin la alianza con la fuerza pública.
Lea también: Mancuso y Timochenko declararán ante Comisión de la Verdad este jueves
Mancuso aseguró que tanto el ejército, la policía y el DAS fueron penetrados por los paramilitares y desde las entidades del Estado recibían listados con personas que estigmatizaban como líderes ideológicos de las Farc, como fueron los casos de Jaime Garzón, Kimy Pernía Domicó, Jesús María Valle, Eduardo Umaña, Elsa Alvarado y Mario Calderón.
“Eran, en su gran mayoría, pedidos que venían desde el Estado y se encargaban a quien mejor pudiere desarrollar esa acción militar”, declaró Mancuso desde una cárcel en Estados Unidos y agregó que personas como José Miguel Narváez, exdirector del Das, daban información sobre personas que debían ser “dadas de baja” e, incluso, llegaba a territorio paramilitar con listados de personas cuya muerte estaba planeada.
“A nosotros Narváez nos llegaba con información muy clara y muy precisa del colectivo José Alvear Restrepo y de varios colectivos de abogados, señalándolos de que eran el brazo jurídico de la guerrilla. Y bueno, afortunadamente nosotros investigábamos y nos dimos cuenta que no todo esto era cierto. El comandante Castaño empezó a tener prevenciones con todos estos hechos, sobre todo por Jaime Garzón y Kimy Pernía Domicó. Él vio el error enorme de las AUC cuando nos préstamos para ejecutar estas acciones para las Fuerzas Militares”, confesó Mancuso en alusión a los “mandados” que hicieron los paras a las autoridades.
Le puede interesar: En libertad policías señalados de asesinar a Santiago Murillo tras una marcha en Ibagué
Por último Mancuso denunció una supuesta estrategia del Estado para desviar los procesos penales en contra del ejército. “La Fiscalía hace parte del ejecutivo, el fiscal general es ternado por el presidente. Por eso cualquiera de los tres de la terna es de las entrañas del presidente y hace lo que el presidente le pide. Así que cuando uno es juez y parte en un conflicto interno armado como este y quiere evadir responsabilidades, pone todo el aparato que está en manos de ellos para evitar que eso se dé. Eso incluye en colocar fiscal afecto a la causa, compra de testigos, amenaza de testigos, testigos falsos, creación de pruebas, destrucción de pruebas. Lo que ven permanentemente en el país”, explicó
El exparamilitar ahora espera que definan su futura extradición entre Colombia e Italia, donde también tiene nacionalidad,