El hospital San Camilo de Buenavista le debe 4 meses de sueldo a sus trabajadores, razón por la cual sus funcionarios también han tenido que realizar suspensión de actividades para que les respondan por su pago. Una situación similar a la que se vive en La Misericordia de Calarcá.
De acuerdo con la gerente del centro médico, Sandra Milena Echeverri González, la crisis obedece al riesgo fiscal de 5 años por el que atraviesa la entidad, además las EPS le deben dinero al hospital lo que no ha permitido tener un flujo de caja para cumplir con algunos gastos.
En contexto: Por falta de pago, hospital de Buenavista suspendió actividades, incluso vacunación contra el Covid
Esta situación ha generado dificultades en el pago del personal de planta, contratistas, proveedores, gastos de funcionamiento, pólizas entre otros gastos del centro asistencial.
Frente a este panorama la gerente indicó que se han realizado algunas gestiones para buscar alivios económicos ante las autoridades locales y territoriales. El costo de la nómina de este centro asistencial es de aproximadamente 46 millones de pesos mensuales.
Según lo señalado por Echeverri Gonzáles, el hospital no es autosostenible, pues debido a que la población que atiende es muy pequeña, al estar ubicado en el municipio más pequeño del Quindío, no hay suficientes ingresos por parte de las EPS para el funcionamiento administrativo del hospital.
Las ayudas que ha recibido el hospital
En el 2020 debido a la pandemia del Covid-19 el gobierno nacional subsidió por 2 meses la nómina del centro asistencial, pero fueron paños de agua tibia en su momento.
Para este 2021 lo único que ha ayudado al hospital es el convenio del Plan de Intervenciones Colectivas, PIC, que contrató por 53 millones de pesos. Vale la pena mencionar que dicho contrato por lo general se pacta por 16 millones de pesos.
Plan de vacunación sigue cumpliéndose
La gerente ratificó que el plan de vacunación contra el Covid-19 sigue llevándose a cabo a pesar de la actual crisis, aunque expresó que esto también ha generado una sobrecarga laboral pues no han podido contratar personal adicional, por lo que dicha labor ha sido asumido por los mismo empleados del centro asistencial que tampoco han recibido su respectivo pago por la inmunización.
Echeverri ya se habría reunido con la Contraloría General del Quindío, la Defensoría del Pueblo, la Procuraduría Regional del Quindío y la secretaría departamental de Salud con el fin de buscar soluciones para que las EPS cumplan con sus pagos.
Con información de La Crónica del Quindío