La autoridad ambiental de Cundinamarca explicó si es lo mismo una chucha que una zarigueya, una pregunta que muchos se hacen.
En el mundo de los marsupiales, la zarigüeya y la chucha son dos nombres que a menudo se entrelazan, pero ¿son realmente la misma especie?
En Colombia, estos marsupiales son conocidos por varios nombres: zarigüeya, chucha, runcho y fara. Sin embargo, todos se refieren a la misma especie.
Su nombre científico es ‘Didelphis marsupialis’ y se les llega a conocer de manera despectiva como ‘chuchas’ debido a su peculiar manera de protegerse del peligro, pues emiten un olor muy desagradable que es tan fuerte como el de un zorrillo.
También se hacen pasar por muertas, quedándose quietas, con los ojos vidriosos y la lengua afuera para distraer a su depredador y, cuando este se aleja, siguen su camino
Características Físicas:
- Las zarigüeyas tienen pelaje grueso y largo, que varía entre negro y gris. Su cabeza es blanquecina, con una nariz rosada y orejas grandes y negras.
- En su etapa adulta, alcanzan hasta 84 centímetros de longitud.
- Son excelentes madres, llevando a sus crías en pequeñas bolsas en el vientre.
Importancia Ecológica de la zarigüeya:
Las zarigüeyas son dispersoras de semillas para la restauración ecológica y controladoras naturales de plagas.
Vale la pena mencionar, que estos animales se alimentan de frutas maduras, vegetales, hojas, así como de pequeños invertebrados, pájaros e incluso gallinas, por eso, su mala relación con los habitantes de zonas rurales en el país.
Si ves una zarigüeya o chucha cerca de tu vivienda, comunícate con las autoridades ambientales competentes para un traslado seguro.
En resumen, aunque los nombres varían, zarigüeyas y chuchas son la misma y tienen papel vital en nuestros ecosistemas. La invitación es a protegerlas y valorar su rol en el planeta.