Jhonatan Andrés Zuluaga Celemín, alias ‘Nené’, líder de la banda delincuencial La Cordillera, que había sido capturado el pasado 28 de mayo en España fue pedido en extradición a Colombia por el ministerio de Justicia.
Precisamente el ministro de Justicia colombiano, Wilson Ruíz señaló que de manera formal le solicitó al gobierno español la extradición de alias ‘Nené’, quien es sindicado de por lo menos 100 asesinatos en el Eje Cafetero, centro de operaciones la estructura delincuencial que lideraba.
En contexto: Cayó en España alias Nené, uno de los más temidos criminales del Eje Cafetero
La solicitud para que Zuluaga Celemín sea extraditado fue realizada por el Juzgado Segundo de Ejecución de Penas y Medidas de Seguridad de Calarcá.
Vale la pena mencionar que Zuluaga también es acusado por los delitos de concierto para delinquir, fabricación, tráfico y porte de armas de fuego accesorios partes y municiones.
Hemos solicitado a la justicia de #España 🇪🇸 la extradición del ciudadano colombiano Jonathan Andrés Zuluaga Celemín, conocido con el alias de ‘El Nene’, requerido por la justicia de nuestro país para pagar una pena 29 años de prisión por diferentes delitos cometidos en #Col🇨🇴 👇🏼 pic.twitter.com/9ATmPFkIzN
— Wilson Ruiz Orejuela (@WilsonRuizO) August 12, 2021
‘Nené’ buscaba expandir su grupo criminal en Europa
La captura se dio gracias al trabajo conjunto entre la policía colombiana y las autoridades españolas que hicieron seguimiento a los familiares del individuo que se desplazaban con frecuencia en avión entre los 2 países. Finalmente labores de inteligencia contra su pareja sentimental permitieron su captura.
Le puede interesar: Video: En Calarcá cayó alias ‘Caliche’, uno de los homicidas más buscados en el Quindío.
Nene sería el responsable de presuntamente posicionar su grupo criminal como una organización bélica, organizada y jerarquizada, así como de expandirla y consolidarla en Europa. Además articulaba negocios de narcotráfico a gran escala en países como Estados Unidos, Panamá, México y Cabo Verde.
Con su detención se habría desestabilizado la línea de mando de La Cordillera por el impacto a nivel finanzas que significa. Zuluaga habría llegado a Madrid en el año 2015 con el fin de proyectar varias sucursales de la organización en España, Bélgica y Francia.